lunes, 29 de octubre de 2012

Pueblo de Arico 1

Nos acoge el municipio de Arico, que sin contar la superficie del Parque Nacional de las Cañadas del Teide, que antes le pertenecía y hoy pertenece a la Orotava, es el de más superficie de la isla de Tenerife.
Arico tiene una extensa costa, zonas de medianías, como el lugar donde está La Malvasía, y montaña. Reúne paisajes desérticos y bosques. Mar y cumbre, que decimos aquí en la isla.
Como el municipio es muy extenso, tiene varios núcleos de Población. Los más próximos a Arico el Viejo, que es donde nos situamos, son Arico el Nuevo y el Porís de Abona. Arico el Nuevo es un caserío declarado protegido como conjunto histórico-artístico. Tiene una nutrida representación de arquitectura tradicional de Canarias. Merece la pena pasear por él, y disfrutar de un almuerzo en el Pimentón, bonito restaurante que regentan Petra y Dirk.
El Porís de Abona es la costa más cercana a Nosotros. Su pequeña playa de arena y la zona de los Prismas, preparada como solarium para el baño en los muelles, lo hacen atractivo para niños y mayores. Desde allí divisamos el faro y la hermita de la Punta de Abona, entre los barcos de pescadores. Es indispensable tomar unas Cañas desde el Café al Mar, y almorzar en el Ancla, o en el restaurante Casablanca, o disfrutar de la amabilidad del personal del Café de Todos.
El Porís ha cautivado a gente famosa, como el prestigioso arquitecto Herzog, que posee aquí una casa.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Bienvenidos a La Malvasía



Conozca La Malvasía, un lugar exclusivo en las medianías de la isla de Tenerife. Las mejores casas rurales para su descanso en vacaciones. La base desde la que hacer turismo por Tenerife y por Canarias.


La Malvasía es una finca para alojamiento de turismo rural en Arico, en el soleado sur de Tenerife, en las islas Canarias.

Cada una de sus tres casas rurales le garantiza las mejores condiciones para su descanso en un entorno agrícola de cultivo de Malvasía entre los caseríos de Arico Viejo y Arico Nuevo. La Malvasía es la prueba de que el turismo rural puede asociarse a la exclusividdad y al lujo.